Os enlazamos con el siguiente artículo aparecido en Argentina, sobre la Lactancia materna prolongada y la edad del destete:
Destacamos y transcribimos las siguientes reflexiones que hacen las dos especialistas que hablan para el artículo:
"Lucía Quintana, nutricionista y coordinadora de la Comisión Provincial de Lactancia Materna, del Ministerio de Salud, rescató lo propuesto por la OMS y explicó: “Lo que hemos acordado con todas las organizaciones civiles que trabajan en este tema, los hospitales y el Banco de Leche, es que el destete sea libre, porque de lo contrario aparecen situaciones tortuosas, como ponerse pimienta en los pezones para que el chico deje de mamar sí o sí al cumplir el año, por dar un ejemplo. Todos los chicos a partir del año deambulan, ya comen más alimentos sólidos y toman el pecho más espaciadamente. Así sucede hasta llegar a los 2 años y más también. Pero debe darse con naturalidad. El corte nunca debe ser abrupto ni impuesto por terceros”.
Además, la especialista reflexionó sobre la lactancia en niños mayores de 2 años e indicó: “En estos casos, lo que hemos recomendado es observar el vínculo entre esa mamá y el bebé, debido a que no todos los chicos maduran de la misma manera y dentro de los mismos tiempos, por lo tanto no se puede generalizar y decir que esa relación es patológica. Los profesionales deben acompañar a la mamá, informarla y ayudarla a que el destete sea natural”.
En el mismo sentido opinó la encargada del Banco de Leche del Lagomaggiore, Lucía Álvarez, quien incorporó otro aspecto de la lactancia, el económico, y lo que significa la teta para muchas mamás de escasos recursos.
“En las comunidades de bajos recursos, donde la única fuente de proteínas adecuada en calidad, cantidad e higiene para el lactante es la leche materna, la alimentación al pecho debe prolongarse lo más posible, incluso hasta los 2 o 3 años. En la clase socioeconómica que dispone de buenos recursos, el interés de la alimentación natural se centra en los aspectos inmunológicos y afectivos, y la lactancia al pecho es exclusiva hasta los seis meses, prorrogables todo el tiempo que para la madre constituya una auténtica satisfacción emocional”, expresó.
Ambas profesionales también coincidieron en advertir que el respeto debe ser igual para la madre que desea amamantar durante todo el tiempo que quiera así como para aquella que decide lo contrario, sin que por eso sea culpabilizada por el entorno."
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